El sueño del proyecto “Escuelas Abiertas Hacia el Bicentenario” se empieza a concretar en una hermosa realidad a través del compromiso y trabajo de las instituciones involucradas en esta actividad, que beneficiará inicialmente a más de 1.500 niñas, niños y adolescentes de 11 unidades educativas de Sucre.
Este sábado fue el primer día de clases, sirvió para que los maestros de diferentes áreas como deportes, danza, ajedrez, dibujo, pintura, música y canto hagan un diagnóstico sobre las habilidades y talentos de los estudiantes que se inscribieron a “Escuelas Abiertas”.
El fin es que las niñas y niños vayan los sábados a tener una experiencia divertida en Escuelas Abiertas, aprendiendo pero de forma divertida, sin los rigores de los días hábiles.
Por ejemplo, la estudiante Mary sostuvo por primera vez en sus brazos una guitarra con la ilusión de aprender a tocar este noble instrumento para alegrarle la vida a su mamá, mientras que Jaimito quiere ser un crack del fútbol de salón. Así empiezan a tejerse los sueños…